Amigo Gerardo! Un rayo de luz puso en tus manos el arte de la pluma, el pulso sereno y en el papel las poesías de mis cuadros. Conseguiste el sumo del arte caligráfico, ni las letras mecánicas superaron tu hacer divino creador. Todo fue maravilloso para revalorizar mi poesía pintada, que nunca por ello te podrá olvidar la (POESIA-PINTADA-PEDAGÓGICA PARA NIÑOS) y que, ¡malos nacidos me han plagiados!...Hoy, te doy las gracias por haberte conocido, por NO mirar las muchas horas que me distes acompañándome en mi arte y amistad. Tu amabilidad y paciencia de santo ha sido siempre para mí el sentirme orgullo de ser tu amigo. ¡Un amigo cabal…lleno de generosidad y sublime! ¡Siempre!...
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Manuel Pereira
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